“El envejecimiento es una etapa del desenvolvimiento que ocurre en el transcurrir de la vida”

Envejecer es un proceso dinámico, gradual y progresivo, donde la persona es alcanzada por alteraciones funcionales, bioquímicas y morfológicas que llevan a innumerables cambios en el organismo.

El proceso llamado “envejecer” causa alteraciones musculo-esqueléticas y osteoarticulares.

Lo que lleva a la disminución y comprometimiento de las funciones musculares y articulares, dificultando el equilibrio, marcha y generando grandes limitaciones funcionales.

Ese es el caso de la osteoartrosis,  también conocida como artrosis, tiene incidencia de 30% a 40% de las enfermedades designadas como reumatismos.

Sabiendo eso, en este texto vamos a explicar como el Pilates trae beneficios para personas con artrosis y como puede ser una clase para ese alumno. Compruebe.

Que es Artrosis?

La artrosis, osteoartritis, artritis degenerativa o enfermedad degenerativa de las articulaciones, es nada más que una disfunción crónica de las articulaciones.

Causada por la degeneración del cartílago y del hueso, pudiendo generar dolor y rigidez articular. Es la enfermedad reumática más prevalente en individuos mayores de 65 años de edad, pudiendo afectar también a personas más jóvenes, indiferente del sexo.

Esta patología puede ser clasificada de dos formas, siendo la primera Idiopática (o primaria) y la segunda por consecuencia (o secundaria).

La artrosis primaria o idiopática recibe este nombre porque la causa es desconocida. Ya la artrosis secundaria recibe este nombre, pues ella viene secundariamente a otra patología primaria, como por ejemplo una infección o uso excesivo de una articulación.

Muchas personas presentan señales de artrosis en las radiografías a la llegada de sus 40 años.

Síntomas

Aunque la mayoría no presente síntomas. De forma general, los síntomas aparecen de forma gradual y pueden aparecer en una o más articulaciones, especialmente en articulaciones de “sustentación”, como la cadera y rodillas.

Es una de las causas más frecuentes de dolor del sistema músculo-esquelético, podemos considerar el dolor como síntoma primario de la artrosis, acometiendo al inicio del movimiento.

Otro síntoma que puede aparecer es la rigidez después de dormir o después de un largo período de inactividad. Sin embargo, esta rigidez/dolor puede desaparecer 30 minutos después del inicio de movimientos.

La articulación acometida por la artrosis puede perder la movilidad, pudiendo incluso quedar completamente rígida en una posición inadecuada.

Existen casos en que ocurre el crecimiento de puntas óseas, pudiendo llevar a compresiones nerviosas, y el paciente referir parestesias, sensaciones extrañas y debilidad.

La articulación puede también tener su tamaño aumentado, y durante el movimiento la persona puede sentir “crepitar” o “crujir”.

Las articulaciones acometidas más comúnmente son: columna vertebral (principalmente cervical y lumbar), los dedos de las manos, y aquellas que soportan el peso del cuerpo, como tobillos, rodillas y caderas.

Causa

Existen estudios que evidencian el envolvimiento genético/hereditario en esta patología, luego, el paciente puede tener mayor susceptibilidad a desarrollar la enfermedad.

Cada persona puede desarrollar la enfermedad de forma diferente, aunque diversos casos sean parecidos.

De esta forma su aparecimiento y evolución son prácticamente únicos para cada paciente, una vez que dependen de factores que pueden facilitar, desencadenar o agravar la artrosis.

Como fue dicho, son diversas las causas de artrosis secundaria, las más comunes son: menopausia, problemas con la tiroides, diabetes, obesidad, problemas ortopédicos y posturales, y hasta la misma ocupación profesional.

Antiguamente la artrosis era vista como una enfermedad que se presentaba en el proceso natural del envejecimiento, sin perspectivas de tratamiento.

Hoy, sin embargo, es vista como una enfermedad de la cual podemos modificar su proceso evolutivo, tanto en relación al tratamiento sintomático, como su pronóstico.

Método Pilates

El Método Pilates es un programa de entrenamiento físico y mental, en el cual el cuerpo y la mente se tornan una sola unidad, haciendo posible explorar el potencial de alteraciones del cuerpo humano.

Este método permite que todo y cualquier individuo pueda realizar las diversas actividades del día a día con placer y energía. Teniendo una buena condición física, consiguiendo intervenir no solo en el cuerpo, sino también en la mente.

Independientemente de la edad o profesión, el Pilates es recomendado para todo tipo de personas. Buscando harmonía mental y física, procurando corregir diversos desequilibrios que rodean nuestro organismo, así como sus debilidades.

De acuerdo con diversos autores, el Método Pilates consiste en un acondicionamiento físico en el que interactúan cuerpo y mente. Ampliando así la capacidad de movimiento, estiramiento, llevando a un aumento del control, ganancia de fuerza, equilibrio de los grupos musculares y la concientización corporal.

Pues trabaja el cuerpo como un todo, desarrollando la estabilidad corporal necesaria para una vida saludable.

Beneficios del Pilates

El Método Pilates presenta innumerables beneficios, y estos, dependen de la forma como los ejercicios son ejecutados. Dando un mayor control muscular, aumento de fuerza, mejorando la capacidad respiratoria, aumenta la energía, proporcionando mejor flexibilidad, llevando la harmonía de los movimientos.

Además de estirar y mejorar el acondicionamiento físico y mental, este método puede proporcionar tonificación muscular, definir la musculatura, corregir posturas, reestructura el cuerpo, aumentar el equilibrio y la coordinación motora, previene lesiones.

Siendo uno de los métodos más eficientes para rehabilitaciones, aumente el autoestima, alivia el estrés y los dolores musculares.

Se basa en principios de la cultura oriental, se configura por la tentativa del control de los músculos involucrados en los movimientos y en la respiración de la forma más consiente posible.

Los principios básicos del Pilates para su ejecución son: centralización, control, respiración, fluidez, precisión y concentración, a partir de los cuales cada ejercicio es adaptado a la condición especial de cada paciente, y la evolución de los ejercicios respeta las características y habilidades individuales de cada persona.

Tratamientos de Artrosis

El paciente cuando es diagnosticado con artrosis debe tener el total esclarecimiento sobre la patología. Señalar que esta enfermedad no es sinónimo de envejecimiento y está totalmente relacionada a capacidad funcional de cada individuo.

Una vez que este busca el tratamiento y hubiera una intervención terapéutica, el mismo obtendrá una mejora en sus actividades de vida diaria, mejorando así su calidad de vida.

Es de extrema importancia el envolvimiento y la motivación del paciente durante su tratamiento, pues cada paciente es una agente activo en su programa de rehabilitación.

La práctica de actividad física debe ser estimulada, pero bajo la orientación de un profesional calificado para acompañar su cuadro clínico.

Los ejercicios terapéuticos deben ser prescritos por el fisioterapeuta. Un programa de tratamiento debe envolver el fortalecimiento, en conjunto con ganancia de masa muscular, ejercicios aeróbicos y de acondicionamiento físico, estiramiento y flexibilidad.

No podemos olvidar de orientar este paciente con relación al uso de rampas y escaleras, y cuanto a la ergonomía del trabajo domestico y/o profesional.

Tipos de tratamiento

El tratamiento de la artrosis debe tener un abordaje multifactorial, una vez que la prescripción de medicamentos de forma aislada no es suficiente para el control ideal de esta patología.

El tratamiento quirúrgico ocurre en los pacientes con la osteoartritis con grado II y III. Cuando la independencia para realizar las actividades de vida diaria esté comprometida y progresando, especialmente en casos en que el paciente ya haya intentado el tratamiento conservador y el mismo no tuvo éxito.

Entonces este paciente debe ser encaminado al ortopedista que hará la evaluación y la prescripción del tratamiento quirúrgico. Las cirugías indicadas envuelven: desbridamiento artroscópico,  osteotomía y artroplastias.

La mejor forma de prevenir, tratar y retardar el surgimiento de la artrosis sería a través de los ejercicios físicos supervisados por un profesional calificado.

Cuanto más temprano la práctica de las actividades físicas mejor el resultado. Principalmente para el paciente sedentario que fue diagnosticado con artrosis. Este debe procurar inmediatamente el complemento de la actividad física, y además que hubiera la liberación medica o fisioterápica.

Cabe recordar que para algunos pacientes en la fase aguda lo mejor es reposo, juntamente con el uso de medicaciones y las sesiones de fisioterapia apenas. En estas situaciones debemos esperar la disminución de este cuadro agudo de señales y síntomas, y así posteriormente iniciar la práctica de alguna actividad física como el Pilates, con un plan de entrenamiento enfocado a las necesidades especificas.

Pilates y sus beneficios en el tratamiento de la artrosis

Los ejercicios físicos actualmente han sido utilizados para tratamiento y prevención de diversas patologías crónico-degenerativas, entre ellas la artrosis.

Terapia física local, rehabilitación, ejercicios, reducción de los factores mecánicos sobre la articulación así como terapias alternativas, pueden proporcionar al paciente acometido mejorías en el cuadro álgico y mantenimiento de la función articular.

Lo que refleja principalmente una mejora en la calidad de vida. La fisioterapia también está entre una de las formas de terapia física de tratamiento para la artrosis, y cuando es bien indicada, ofrece excelentes respuestas.

El Pilates cuando es aplicado a la población anciana, favorece la mejora en la movilidad y fuerza, que generalmente están alteradas debido a las enfermedades degenerativas, como la artrosis. Este método también auxilia en la manutención de la presión arterial, además de influenciar en la calcificación ósea.

Utilizando los recursos terapéuticos dentro de la fisioterapia, el profesional debidamente calificado debe usar y abusar del Método Pilates para la rehabilitación de los pacientes con artrosis.

Una vez que la patología evoluciona de forma diferente para cada individuo, al prescribir los ejercicios debemos respetar las limitaciones de cada paciente. Así como, la amplitud de movimiento, dolores articulares, las intensidades y resistencias de los resortes a utilizar en los aparatos o de las cintas elásticas aplicadas en cada ejercicio.

Es de extrema importancia que el grupo muscular alrededor de la articulación involucrada sea estirado y fortalecido, disminuyendo así la fricción entre las superficies óseas, y por consecuencia el dolor y presión intra-articular.

La práctica de los ejercicios dentro del Pilates hace que el propio movimiento aumente la lubricación de las articulaciones. Lo que disminuye el dolor y por consecuencia mejorando la calidad de los movimientos que antes eran limitados.

Además ocurre una disminución importantísima del riesgo de deformidad articular sumado a la mejora en la calidad de vida.

Conclusión…

Dentro del Método Pilates existen innumerables ejercicios en que el paciente puede  sin sobrecarga articular. Favoreciendo así la articulación y facilitando la ejecución del movimiento sin la incomodidad.

El profesional calificado debe estar siempre atento a las correcciones a ser hechas siempre que sea necesario.

La postura del paciente durante la ejecución de los ejercicios debe evitar compensaciones innecesarias, que pueden perjudicar la salud del mismo, así como agravar la patología en cuestión. De esta forma las orientaciones deben ser claras y objetivas.

Espero que este texto te ayude futuramente con tus alumnos ancianos… te gustó el texto? Tienes algo que añadir? Deje aquí en los comentarios!

“Cuando todos sus músculos estén propiamente desarrollados, usted realizará con rutina sus ejercicios con un mínimo de esfuerzo y un máximo de placer”.

                  Joseph Pilate